16 septiembre, 2013 por Arturo Taibo
La misión de la Política y de los políticos es convencer a la gente de que pueden solucionar sus problemas mediante las leyes y luego aplicarlas.
Aunque evidentemente no mediante leyes que garanticen la libertad, porque entonces la actividad de los políticos acabaría rápidamente.
Es evidente que un sistema de Libre Mercado tiene fallos y errores.
La Política puede ser un buen medio de corregirlos.
Pero dentro de unos límites puesto que la Política y los políticos también cometen errores.
Pero los políticos no están interesados en una acción limitada de la Política, ni siquiera tienen como objetivo la solución de los problemas.
Los políticos están más interesados en crear tensión.
Por lo menos los malos políticos, que son casi todos en España.
Problemas.
Los políticos sobreviven de ofrecer a la gente soluciones a sus problemas.
Pero muchos de los problemas los han creado los políticos, otros son inexistentes y desde luego nunca solucionan los que pretenden solucionar.
(En España) los políticos de todos los colores llevan prometiendo que acabarán con el paro desde hace más de 30 años… tenemos la tasa de paro más alta de la OCDE.
En algunas comunidades autónomas el paro es de más del 30 %, pero los políticos siguen prometiendo lo mismo y gastando miles de millones de euros.
Pero además de no solucionar el problema del paro y la pobreza (que es lo que importa) los políticos se dedican a fomentar toda clase de problemas… a los que luego ofrecen soluciones que nunca solucionan nada. Veamos algunos “problemas” y su realidad:
Desigualdad, los ricos son cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres, fomentar el “odio al rico”.
Pero resulta que:
Tenemos una de las presiones fiscales más altas del mundo.
El Estado ya dispone de decenas de miles de millones de euros con que solucionar el problema. Es falso que los ricos sean cada vez más ricos y los pobres más pobres.
Si hay un problema es el de cómo es posible que el Estado con la cantidad de dinero que recauda no sea capaz de acabar con la pobreza.
Hombres contra mujeres (y viceversa). Vivimos en una sociedad machista. Decenas de mujeres mueren cada año víctimas de sus parejas, otras miles sufren abusos. Las mujeres padecen un “techo de cristal” que les impide acceder a los altos cargos en las empresas.
Pero resulta que:
El Estado ya gasta millones en el tema. Las leyes no discriminan a las mujeres, en cambio sí discriminan a los hombres. La igualdad ante la ley y en la sociedad no necesariamente va acompañada de igualdad en los resultados. Se debería aceptar algo tan elemental como que los hombres y las mujeres no son iguales.
El 99 % de los hombres no maltrata a su pareja, la mayoría la quiere y la apoya, también hay mujeres que maltratan e incluso matan a su pareja. No tiene sentido hacer una causa general contra los hombres por ese 1 % violento, términos como “violencia machista” son simplemente repugnantes e incitan al odio.
La pobreza y la falta de educación son un factor fundamental en el maltrato en la pareja, nuevamente ¿Qué hace el Estado con la cantidad de dinero que recauda?
Austeridad vs crecimiento o estímulo.
Las políticas de austeridad maltratan e incluso matan a las personas. El Estado del bienestar está siendo desmantelado y/o privatizado.
Pero resulta que:
A pesar de las protestas de determinados grupos de presión, fundamentalmente funcionarios, la pretendida austeridad es falsa. Los gastos públicos en educación o sanidad por persona son los mismos o superiores que al principio de la burbuja. Los gastos en pensiones y subsidios a los parados se han disparado en los últimos diez años.
Las políticas de estímulo ya han sido probadas (Plan E) y sus resultados han sido mínimos y temporales, al final lo único que tuvimos y tenemos es más déficit, más deuda y más intereses que pagar.
Nacionalismos. Madrid nos roba. Derecho a la autodeterminación.
Pero resulta que: una disolución de la Nación y del Estado español no mejoraría el nivel de vida de ninguna comunidad autónoma. Las relaciones entre las diversas comunidades autónomas son tan estrechas que una ruptura sólo produciría daños a todas las partes.
Las autonomías tienen poderes amplísimos y gastan decenas de miles de millones de euros, pero está claro que a los políticos nacionalistas nunca les ha interesado la autonomía sino como manera de llegar a la independencia.
Pensionistas.
Las pensiones están en peligro.
Pero resulta que:
El sistema de pensiones defendido por la mayoría de los políticos era insostenible desde el momento en que para que funcionase era necesario que, de media, cada mujer tuviese tres hijos o que todo el mundo se muriese a los 75 años. Y eso no sucede desde hace más de 40 años.
Ecología, cambio climático.
Estamos destruyendo el planeta.
Pero resulta que:
Las materias primas no se agotan, la Tierra no se calienta desde hace 16 años, poco podemos hacer para que los países más contaminantes del mundo dejen de hacerlo. ¿Puede un político español hacer que China reduzca sus niveles de contaminación?.
La industria ofrece productos cada vez menos contaminantes.
Deslocalización, las empresas cierran para irse a países con mano de obra más barata, nos quedaremos sin industria, la culpa del paro es de la importación de productos de China, Vietnam, Bangladesh.
Pero resulta que:
España también exporta, ¿Cree alguien que podríamos limitar las importaciones sin que los demás países nos cerrasen sus mercados a nuestros productos? Si producimos aquí con mayores costes los precios serán mayores y nos empobreceremos, ¿De verdad alguien cree que volver a la autarquía de los años 40 y 50 del siglo pasado nos haría más ricos?
Guerracivilismo. Hay un peligro de vuelta al fascismo. Hay que rehabilitar la República y a los republicanos. Dividir a los ciudadanos en rojos/republicanos/demócratas y azules/franquistas/fascistas.
Pero resulta que:
A la mayoría de los españoles el tema le resulta indiferente. No existe ninguna amenaza fascista. La gente que participó en la Guerra Civil e incluso en la posguerra (1939 – 1959) o está muerta o tiene ya más de 70 años. De hecho la mayoría de los españoles tenían menos de 15 años cuando murió Franco.
Utilizar una guerra lejana y fraticida en la que ambos bandos cometieron atrocidades para dividir a los españoles es algo miserable.
Fumadores contra no fumadores.
El tabaco mata, hay que proteger a la gente y prohibir su consumo en todas partes.
Pero resulta que:
El tabaco, como las demás drogas legales y no legales, mata, pero eso lo sabe todo el mundo y lo ponen bien claro en las cajetillas. Pero como droga legal, y todas las drogas deberían serlo, la gente puede consumirla bajo su propia responsabilidad.
La solución del problema del fumador pasivo es muy sencilla: libertad. Los propietarios de los establecimientos deben decidir si se puede fumar o no en sus tiendas. Es evidente que la mayoría de ellos decidirán prohibir fumar en sus tiendas: alimentación, artículos de limpieza, ropa, zapatos, libros, joyas, ópticas, dentistas, seguros, viajes, electrodomésticos, informática, herramientas, muebles, bricolage… en todos esos sitios por higiene, seguridad y por no perder clientes lo más probable es que los dueños prohíban fumar sin que sea necesario ninguna ley.
Pero en casos como un bar o un casino es más probable que haya empresarios que opten por dejar fumar o por establecer sitios para fumadores y no fumadores. La pretensión de los antitabaco de prohibir fumar en todas partes va contra la libertad de la gente. Nadie les obliga a ir a un casino o a un bar donde se permite fumar. Es normal que en un edificio público (del Estado), donde la gente tiene necesariamente que entrar, se prohíba fumar para no dañar a los no fumadores pero nadie obliga a entrar en un bar, una discoteca o un casino.
Ricos contra pobres, hombres contra mujeres, contribuyentes contra funcionarios, unionistas contra separatistas, desarrollistas contra ecologistas, pensiones públicas contra inversión privada, librecambistas contra proteccionistas, rojos contra fachas, fumadores contra no fumadores… y viceversa.
Es el mundo en que nos quieren hacer vivir los políticos. Un mundo donde, por supuesto, ellos nos protegerán con sus leyes, reglamentos, comités, observatorios, oficinas… del otro que nos amenaza. Un mundo donde cada vez deberemos entregarles más libertad a cambio de menos riqueza. Porque toda la gigantesca maquinaria política y burocrática nos cuesta una fortuna. Porque los políticos nunca se hacen responsables de los desastres económicos que producen sus acciones.
Conclusión.
Los políticos están interesados en dividir a la sociedad generando problemas para luego presentarse a las elecciones ofreciendo soluciones.
Los políticos siempre están exigiendo más leyes y más dinero pero nunca solucionan los problemas.
En definitiva la Política y los políticos se han convertido en el auténtico problema.
Y sin embargo…
La gente sigue votando a los políticos. Así que tenemos los políticos y la Política que nos merecemos.
Pero vivimos en una época en que la gente no asume sus responsabilidades, la culpa siempre es del otro, del político, de la crisis, de los bancos, de los chinos, de la UE…
No hay comentarios:
Publicar un comentario