Esta semana el Congreso aprobó la ley que exonera del Impuesto General a las Ventas (IGV) a alimentos de primera necesidad como el pollo, huevos, azúcar, pastas crudas y pan.
Sin embargo, los gremios y especialistas advierten que esta medida podría no tener ningún efecto en el alza de precios.
El economista y director de Instituto Peruano de Economía (IPE), Diego Macera, señala que es posible que la medida sea bastante limitada e incluso algunos precios podrían no moverse del rango en el que se encuentran actualmente.
"Lamentablemente muchos de los precios no van a bajar en la misma proporción y creo que hay que se bien claro en señalar que quizás algunos ni siquiera se muevan", comentó en RPP.
Macera indica en primer lugar que esto se debe a que la iniciativa aprobada no tuvo en cuenta a toda la cadena de producción que hay detrás de un alimento básico.
"En la forma en que se ha aprobado la norma no se ha incluido a toda la cadena de producción que se necesita. Entonces desde el empaquetado u otros insumos que se necesitan (para la fabricación) estos van a seguir pagando IGV y por lo tanto esto se va a reflejar en el precio final", explicó.
También señala que en algunos productos se tienen cadenas informales que de por sí no pagan IGV.
"En algunos productos tenemos sumamente cadenas informales, que ya de plano no pagaban IGV, donde muchísima gente compra. Ahora la gente va a esperar a que los productos bajen de precio, pero la verdad hay productos que no estaban pagando IGV desde el comienzo", sostiene.
El especialista señala que en los sectores formales sí se podría ver un ligero efecto, que no llegaría a ser del 18% que se paga de IGV, pero en los centros de comercio informales no se verían diferencias en los precios.
Antes de la aprobación de la ley, la Asociación Peruana de Avicultura (APA) emitió un comunicado advirtiendo que la medida no tendrá efecto para reducir los precios del pollo ni el huevo.
"En el caso de la norma propuesta este efecto adverso se dará debido a que el texto no contempla la devolución del IGV que se paga en los insumos, materias primas, bienes intermedios y servicios usados en su producción, por lo que este monto se convertirá en costo y afectará el precio final de estos alimentos, causando el efecto contrario al que se busca", señalaron.
Por su parte, la Asociación Peruana de Empresarios de la Panadería y Pastelería (Aspan) tampoco garantizó que esta medida se traduzca en una reducción del precio de sus productos.
“La reducción del IGV al pan no garantiza la reducción o el aumento de su precio. Asimismo, la reducción del IGV de solo la harina para elaborar pan, no garantiza la reducción o el aumento del precio del pan”, indicaron en un comunicado.
La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) también se sumó a las criticas en contra del proyecto, indicando el no exonerar a toda la cadena productiva nacional conllevará a afectar a las mypes y a agricultores.
"Para evitar afectar a las empresas, debe buscarse un mecanismo que no grave la cadena productiva de fabricación nacional y contar con un mecanismo ágil de devolución de todo el IGV, como el que tienen los exportadores; además de focalizar el apoyo entre los peruanos que más lo necesitan", agregaron.
Medidas alternativas
Macera señaló que para beneficiar a la población vulnerable se podrían establecer medidas de subsidio focalizado.
"Podrían haberse considerado transferencias en efectivo mucho más acotadas que el Bono Yanapay pensando solo en familias vulnerables. Se debería estar apoyando más también a las ollas comunes", sostuvo.
Agregó que, a mediano plazo, lo más importante es reconstruir la situación del empleo con mayor inversión y mayor promoción de estabilidad.