El presente manual de historia de la filosofía es una obra escrita por un gfrupo de prestigiosos aujtores soviéticos. El primer tomo expone sistematizadamente las etapas fundamentales de la trayectoria del pensamiento filosófico desde los tiempos antiguos hasta el período de aparición de la filosofía marxista. Es éste un libro de texto destinado a las facultades de filosofía de los centros de enseñanza superior.
CAPITULO I
LA HISTORIA DE LA FILOSOFÍA EN CUANTO CIENCIA,
SU OBJETO, MÉTODO Y SIGNIFICACIÓN
1. Objeto de la historia de la filosofía en cuanto ciencia
El problema cardinal de la filosofía y el objeto de la misma
La filosofía' es una forma particular de conocimiento del mundo, un sistema de concepciones referentes a los problemas más generales del ser y del conocimiento y, ante todo, al cardinal de ellos: la relación entre el pensamiento v el ser, entre el espíritu y la naturaleza. Es una de las formas de la conciencia social, pertenece a la superestructura ideológica y expresa, en la sociedad clasista, la cosmovisión de una clase determinada. Al propio tiempo siempre desempeña funciones cognoscitivas (heurísticas, en una u otra medida) y se torna en su desarrollo ciencia autónoma con su propio objeto, que cambia al evolucionar la sociedad y el saber científico. El objeto de la filosofía marxista-leninista, esto es, del materialismo dialéctico, lo constituven las leyes más generales del desarrollo de la naturaleza, de la sociedad y del pensamiento.
El problema cardinal de la filosofía tiene dos aspectos. El primero concierne a lo <]ue se entienda por primario: la materia o el espíritu, el ser o el pensar. Los filósofos para (juienes la materia, la naturaleza, el ser es lo primario se instalan dentro del marco del materialismo. Los que sostienen (¡ue lo primario es la conciencia, el pensamiento, el espíritu (o Dios, como muchos de ellos entienden) se insertan en el bando del idealism'o. Existen asimismo corrientes intermedias (el dualismo, etc.) para las cuales la materia y el espíritu son entes autónomos independientes entre sí.
El otro aspecto del problema cardinal de la filosofía concierne a si el mundo es cognoscible, a si las representaciones y conceptos del hombre pueden ser la verdad objetiva o el mundo es incognoscible y no puede existir la verdad objetiva. El materialismo afirma que el mundo es ciertamente cognoscible en principio y juzga el conocimiento reflejo de la realidad exterior. Los idealistas, en los casos en que admiten la conoscibilidad del mundo, niegan que la realidad objetiva, que se halla fuera de la conciencia, del espíritu, se refleje en la conciencia del hombre. Parte considerable de los idealistas son agnósticos, es decir, niegan la cognoscibilidad del mundo. El agnosticismo es un intento de renunciar a resolver el problema fundamental de la filosofía, de cabalgar entre el materialismo y el idealismo.
La filosofía nació hace unos tres mil años en los países de Oriente. Ya en la antigüedad se forman en ella las dos corrientes contrapuestas: el materialismo y el idealismo. Junto a esta contraposición aparecen en el desarrollo de la filosofía dos enfoques opuestos sobre el conocimiento del mundo: el método de pensamiento dialéctico y el metafísico.
El método dialéctico considera los fenómenos todos en interconexión, en proceso de desarrollo y cambio, pone al descubierto las contradicciones internas y la lucha entre ellas que condicionan ese proceso. El método metafísico que, como dijera Engels, tuvo "gran justificación histórica en su tiempo", se limita preferentemente al análisis y clasificación de los objetos y fenómenos fuera de su interconexión y desarrollo, los considera cambiantes en el orden cuantitativo principalmente y exentos de contradicciones internas y de lucha entre ellos. Son, pues, no sólo dos enfoques distintos, sino también dos interpretaciones distintas de la realidad.
La interpretación marxista del objeto
de la historia de la filosofía en
cuanto ciencia
La historia de la filosofía como ciencia trata del nacimiento y evolución de las doctrinas que ofrecen una u otra solución a los problemas de la filosofía, de la relación entre el hombre y el mundo, una explicación —sea materialista o idealista, dialéctica o metafísica— de las leyes generales del ser y el conocimiento.