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viernes, 9 de septiembre de 2022

CAPITULO I LA HISTORIA DE LA FILOSOFÍA EN CUANTO CIENCIA, SU OBJETO, MÉTODO Y SIGNIFICACIÓN

 El presente manual de historia de la filosofía es una obra escrita por un gfrupo de prestigiosos aujtores soviéticos. El primer tomo expone sistematizadamente las etapas fundamentales de la trayectoria del pensamiento filosófico desde los tiempos antiguos hasta el período de aparición de la filosofía marxista. Es éste un libro de texto destinado a las facultades de filosofía de los centros de enseñanza superior.

CAPITULO I 

LA HISTORIA DE LA FILOSOFÍA EN CUANTO CIENCIA, 

SU OBJETO, MÉTODO Y SIGNIFICACIÓN 


1. Objeto de la historia de la filosofía en cuanto ciencia 

El problema cardinal de la filosofía y el objeto de la misma 

La filosofía' es una forma particular de conocimiento del mundo, un sistema de concepciones referentes a los problemas más generales del ser y del conocimiento y, ante todo, al cardinal de ellos: la relación entre el pensamiento v el ser, entre el espíritu y la naturaleza. Es una de las formas de la conciencia social, pertenece a la superestructura ideológica y expresa, en la sociedad clasista, la cosmovisión de una clase determinada. Al propio tiempo siempre desempeña funciones cognoscitivas (heurísticas, en una u otra medida) y se torna en su desarrollo ciencia autónoma con su propio objeto, que cambia al evolucionar la sociedad y el saber científico. El objeto de la filosofía marxista-leninista, esto es, del materialismo dialéctico, lo constituven las leyes más generales del desarrollo de la naturaleza, de la sociedad y del pensamiento. 

El problema cardinal de la filosofía tiene dos aspectos. El primero concierne a lo <]ue se entienda por primario: la materia o el espíritu, el ser o el pensar. Los filósofos para (juienes la materia, la naturaleza, el ser es lo primario se instalan dentro del marco del materialismo. Los que sostienen (¡ue lo primario es la conciencia, el pensamiento, el espíritu (o Dios, como muchos de ellos entienden) se insertan en el bando del idealism'o. Existen asimismo corrientes intermedias (el dualismo, etc.) para las cuales la materia y el espíritu son entes autónomos independientes entre sí. 

El otro aspecto del problema cardinal de la filosofía concierne a si el mundo es cognoscible, a si las representaciones y conceptos del hombre pueden ser la verdad objetiva o el mundo es incognoscible y no puede existir la verdad objetiva. El materialismo afirma que el mundo es ciertamente cognoscible en principio y juzga el conocimiento reflejo de la realidad exterior. Los idealistas, en los casos en que admiten la conoscibilidad del mundo, niegan que la realidad objetiva, que se halla fuera de la conciencia, del espíritu, se refleje en la conciencia del hombre. Parte considerable de los idealistas son agnósticos, es decir, niegan la cognoscibilidad del mundo. El agnosticismo es un intento de renunciar a resolver el problema fundamental de la filosofía, de cabalgar entre el materialismo y el idealismo. 

La filosofía nació hace unos tres mil años en los países de Oriente. Ya en la antigüedad se forman en ella las dos corrientes contrapuestas: el materialismo y el idealismo. Junto a esta contraposición aparecen en el desarrollo de la filosofía dos enfoques opuestos sobre el conocimiento del mundo: el método de pensamiento dialéctico y el metafísico. 

El método dialéctico considera los fenómenos todos en interconexión, en proceso de desarrollo y cambio, pone al descubierto las contradicciones internas y la lucha entre ellas que condicionan ese proceso. El método metafísico que, como dijera Engels, tuvo "gran justificación histórica en su tiempo", se limita preferentemente al análisis y clasificación de los objetos y fenómenos fuera de su interconexión y desarrollo, los considera cambiantes en el orden cuantitativo principalmente y exentos de contradicciones internas y de lucha entre ellos. Son, pues, no sólo dos enfoques distintos, sino también dos interpretaciones distintas de la realidad. 

La interpretación marxista del objeto 

de la historia de la filosofía en 

cuanto ciencia 

La historia de la filosofía como ciencia trata del nacimiento y evolución de las doctrinas que ofrecen una u otra solución a los problemas de la filosofía, de la relación entre el hombre y el mundo, una explicación —sea materialista o idealista, dialéctica o metafísica— de las leyes generales del ser y el conocimiento.  

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La gran mentira del Premio Nobel de Economía

 


La gran mentira del Premio Nobel de Economía

  • En 1968, el Banco de Suecia intentó elevar a la Economía al Olimpo al que Alfred Nobel había encumbrado a la Medicina, la Fisiología, la Literatura, la Paz, la Química y la Física. Acababa de nacer la gran mentira de los premios más prestigiosos del mundo.

Alvin E. Roth y Lloyd S. Shapley ganan el Nobel de Economía 2012
Alvin E. Roth y Lloyd S. Shapley ganan el Nobel de Economía 2012
Ruth Ugalde

Cuando Alfred Nobel (Estocolmo 1833-San Remo 1896) dejó como legado destinar su fortuna a premiar aquellos campos que hacían mejor al ser humano, no pensó en la Economía.

Sin embargo, la Real Academia Sueca de las Ciencias se viste hoy de largo para elegir al 44 Premio Nobel de Economía y conseguirá, con este gesto, seguir alimentando la gran traición al legado del inventor de la dinamita.

Al menos, eso opina Peter Nobel, uno de los herederos de Alfred Nobel, quien suscribió un artículo, publicado el 10 de diciembre 2004 en el diario sueco Dagens Nyheter, en contra de este galardón, cuyo verdadero nombre es Premio del Banco de Suecia de Ciencias Económicas en Memoria de Alfred Nobel.

El texto, firmado por el matemático Peter Jager, miembro de la Real Academia Sueca de Ciencias; el ex ministro de Medioambiente Mans Lorarroth, y el economista y ex miembro del Parlamento sueco Johan Lonnroth, criticaba que este galardón se concedían a trabajos cuya aportación a la mejora de la humanidad estaba más que en entredicho.

La elección de Finn E. Kydland y Edward C. Prescott ese mismo año 2004 destapó la caja de los truenos y empujó al citado grupo de economistas y matemáticos a rebelarse contra el galardón. Entre otros motivos, porque los flamantes ganadores habían defendido, 27 años antes, que los bancos centrales debían ser independientes.

Según ellos, habían descubierto un modelo matemático capaz de demostrar la idoneidad de que las políticas monetarias, y con ellas, la distribución de la riqueza, estuvieran fuera del control de los representantes elegidos democráticamente, poniendo así en jaque no sólo al sistema, sino la transparencia de la función pública.

Historia de una polémica


El falso Premio Nobel de Economía fue creado en 1968 por el Banco de Suecia, con motivo de su 300 aniversario, a imagen y semejanza de los auténticos Nobel y con una dotación de un millón de dólares (actualmente concede diez millones de coronas suecas, como los Premio Nobel).

"Lo que el Banco de Suecia hizo fue similar a una infracción contra una marca registrada, lo que significa un inaceptable robo a los verdaderos Premios Nobel. Dos tercios de esos premios fueron a economistas de Estados Unidos, a gente que especula en mercados de valores. Éstos no tienen nada que ver con el objetivo de Alfred Nobel de mejorar la condición humana y de propiciar nuestra supervivencia, ellos son exactamente lo opuesto".

Estas palabras, pronunciadas por Peter Nobel durante una entrevista con la economista estadounidense Hazel Henderson, concentran el sentir de todos los opositores al Premio del Banco de Suecia.

La propia página web de la Fundación Nobel distingue entre los galardones con pedigrí, es decir, los elegidos por su fundador y por tanto los únicos dignos de llevar su apellido; y el Premio en Ciencias Económicas, término que utiliza la Fundación para referirse al falso Nobel.

Pero esto no evita la confusión, ni impide que, de facto, se eleve a la Economía al Olimpo creado por el inventor de la dinamita para la Medicina, la Fisiología, la Literatura, la Paz, la Química y la Física.

Los mayores errores

A esta polémica se une el elevado número de economistas estadounidenses premiados por la Academia Sueca, la inmensa mayoría de ellos seguidores del neoriberalismo que tan bien encarna la Universidad de Chicago. De hecho, este centro acumula el mayor número de premios Nobel de Economía del mundo, con un total de 10.

Más controvertido es justificar el premio concedido en 1997 a Robert C. Merton y Myron S. Scholes, por el nuevo método que desarrollaron para calcular el valor de los derivados. Éste fue puesto en práctica en el hedge fund Long Term Capital Management (LTCM), co-fundado por los dos premiados, que apenas un año después quebró y desató tal cataclismo financiero que la Reserva Federal tuvo que salir al rescate.

Estos ejemplos han llevado a los opositores al Premio del Banco de Suecia a pedir su abolición o, al menos, a exigir que se modifiquen los criterios de selección del ganador, con el objetivo de dirigirlos hacia descubrimientos que, realmente, ayuden a mejorar la sociedad.

Como el Grameen Bank, creado por el economista bengalí Muhammad Yunus y dedicado a conceder microcréditos a los pobres. Esta labor, efectivamente, fue merecedora de un Nobel en 2006, el de la Paz. Ese mismo año, Edmund Phelps, de la Universidad de Columbia, fue reconocido con el galardón en Economía por su trabajo en el que redefinía la tasa natural de desempleo.

Cuando Hazel Henderson preguntó a Peter Nobel sobre estos dos galardones, el descendiente de Alfred Nobel respondió en referencia a Yunus: "Es la primera vez que un economista obtiene un Premio Nobel verdadero".

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